Mano a Mano es una ONG que se fundó en 1994 gracias a la iniciativa de empleados de Iberia con un objetivo fundamental: aprovechar los recursos de la compañía para enviar ayuda humanitaria a aquellos países en vía de desarrollo y con altas tasas de pobreza, y el transporte de ayuda a aquellos que se ven afectados por catástrofes naturales, terremotos, huracanes, inundaciones e incluso por guerras, y entregar esa ayuda sin intermediarios, como su propio nombre indica, de mano a mano.
Durante estos años, Mano a Mano ha repartido esta ayuda humanitaria en forma de alimentos, ropa, calzado, material sanitario, material escolar y juguetes entre otras cosas.
Los ingresos de Mano a Mano provienen, fundamentalmente, de las cuotas y los donativos que sus socios aportan anualmente. Este dinero se invierte, básicamente, en proyectos llevados a cabo en España, Argentina, Cuba, Guatemala, Ecuador, Colombia, Guinea Ecuatorial, Nicaragua, Perú, Venezuela y Haití.
Cómo se fundó
Muchos tripulantes de cabina de pasajeros de Iberia llevaban en sus equipajes cosas que en su entorno parecían menos útiles pero que, en los países a los que viajaban por su trabajo, resultaban muy necesarias y difíciles de conseguir para una gran parte de su población.
Estos empleados al dar un paseo o salir a conocer el lugar, toman conciencia de la precaria situación en que se encuentran ciertos núcleos de la población contactan, habitualmente, con personas que ya en estos lugares dedican su vida a mejorar la de otros: unas monjitas aquí, un maestro de escuela allá, o simplemente el camarero o el maletero del hotel les piden algo que necesita su hijo, su madre o una hermana que, generalmente suelen tener muchos hijos y están sin trabajo. Ellos saben que, en un mes, o dos, alguien de Mano a Mano volverá con lo que nos han pedido.
En muchas ocasiones los productos solicitados son tan básicos como cuadernos y lápices para los niños, esa ropa que a nuestros hijos les quedo pequeña casi nueva, esos juguetes que se arrinconan o se guardan en un armario y que a nosotros solo nos sirven para coger polvo. Los medicamentos, que colocamos en el armario del baño cuando estamos curados y que un día recuperamos, seguramente, para darnos cuenta de que están caducados y debemos deshacernos de ellos y comprar unos nuevos.
Algunas peticiones no son fáciles de conseguir, entonces los tripulantes intentan adquirirlas de forma gratuita entre sus familiares o vecinos.
Dado que este tipo de ayuda se convirtió en algo habitual entre muchos tripulantes, un grupo de ellos tuvo la idea de organizarse y crear la ONG Mano a Mano, para canalizar el esfuerzo y sacrificio de estas personas que, quitándose tiempo de su propio descanso o simplemente de su ocio personal, dedicaban horas o días de su vida a recolectar estos pequeños tesoros que luego repartirían entre los que con ilusión esperaban nuestro regreso.
Desde un principio Iberia estuvo a nuestro lado demostrando su total solidaridad en este empeño. Para ello pone a disposición de Mano a Mano el espacio disponible en sus bodegas para el transporte de material sanitario, material escolar, ropa y alimentos, que muchas empresas, numerosos ayuntamientos es sus campañas solidarias y colaboradores particulares donan a Mano a Mano para que sean distribuidos en aquellos lugares que más lo necesitan. Iberia ha llegado incluso, en situaciones puntuales, a fletar aviones especiales, de forma gratuita, para hacer llegar la ayuda más necesaria en momentos de especial gravedad.